Cuidado de los dientes en conejos y roedores

El cuidado bucodental de nuestras mascotas es muy importante para gozar de una buena salud. Al igual que nosotros visitamos de forma periódica a nuestro dentista, deberíamos hacer al menos una revisión anual de la boca de nuestros pequeños animales.

La masticación es vital para una buena digestión y la salud de sus dientes es imprescindible para su calidad de vida. Es muy importante que conozcamos el tipo de dieta que deben consumir los conejos o los roedores que tenemos en casa, así como las características de su dentadura para un mejor control de posibles enfermedades.

Características dentales de los conejos, coballas y chinchillas

Los conejos son lagomorfos, se diferencian de los roedores porque presentan seis incisivos, dos inferiores y cuatro superiores mientras que los roedores solo tienen cuatro incisivos, dos inferiores y dos superiores. Los incisivos son fáciles de observar en casa. Para la exploración de premolares y molares debemos usar instrumental específico. Los incisivos se usan para cortar, los premolares y molares sirven para  triturar el alimento. Al masticar el movimiento de la mandíbula es lateral y unidireccional permitiendo el perfecto desgaste de los dientes.

Los conejos, cobayas y chinchillas son animales herbívoros que se alimentan de plantas que se encuentran en su hábitat natural. Su dieta se basa en vegetales con una alta concentración en fibra y pobre valor nutricional lo que hace necesario la ingesta continua de grandes cantidades de alimento.

Estos animales tienen las raíces abiertas de TODOS sus dientes, lo que significa que crecen de forma continua durante toda la vida del animal, de media crecen de 2mm a 4mm a la semana. La dieta alta en fibra favorece la digestión y el desgaste natural de los dientes.

Problemas dentales en otros roedores

En otros animales roedores, como el hámster, el ratón, el jerbo o la rata, su dieta se basa en tubérculos, semillas y granos. Sus dientes no están expuestos a tanto desgaste y por lo tanto en ellos solo los incisivos crecen de forma continua durante toda su vida.

Cuando ofrecemos a nuestra mascota alimentos que no necesitan ser masticados demasiado, como pueden ser las verduras o el pienso, los dientes no se desgastarán correctamente y formaran picos o puntas que pueden provocar heridas en lengua o mejillas. Para evitar el dolor provocado por esos picos se modifica el movimiento de masticación, se desvía la mordida afectando también a los incisivos. Este proceso se conoce como síndrome de mala oclusión ó enfermedad dental adquirida.

Causas de la mala oclusión

Las principales causas de una mala oclusión en roedores:

  • Dieta incorrecta.
  • Malformaciones, las razas “enanas” tienen predisposición a defectos en la longitud de maxilar y mandíbula lo que provoca una mordida anormal y sobrecrecimiento de los incisivos.
  • Agentes infecciosos.
  • Enfermedad Metabólica Osea, por déficit de luz UV, déficit de vitamina D o déficit de vitamina C en cobayas.

Si no detectamos el problema a tiempo nuestra mascota puede presentar los siguientes signos:

  • Deja de comer parcial o totalmente.
  • Selecciona el alimento (sólo consumen alimentos suaves).
  • Pérdida de peso.
  • Incisivos sobrecrecidos.
  • Salivación excesiva.
  • Mentón y cuello húmedo.
  • Descarga nasal.
  • Lagrimeo en uno o los dos ojos.
  • Abscesos o pus en la cara o debajo de la mandíbula.

Si llegas a observar uno o más de estos signos será necesario que tu mascota reciba atención médica en la que se realizará una exploración general y una exploración de la boca. Además se obtendrán radiografías en varias proyecciones para determinar el problema que presenta cada paciente.

Y finalmente llevaremos a cabo o bien la solución quirúrgica específica  para cada individuo, limado, corregir desviaciones ó extracción de piezas. O bien tratamiento paliativo.

Prevención

Algunos consejos para el control de la enfermedad dental adquirida son:

  • REVISIONES EN EL VETERINARIO: Prevenir o detectar una enfermedad en fase temprana obtiene un mejor éxito. Por eso recomendamos dos visitas anuales para valorar enfermedad dental adquirida entre otras cosas:
  • DIETA Y LUZ SOLAR: Es fundamental una dieta equilibrada y rica en alimentos fibrosos, no abusando de piensos o pellets. Debemos permitir el acceso controlado a la luz solar directa, para una correcta absorción de la vitamina D.
  • PESO: Pesar a nuestras mascotas en casa es muy sencillo, de este modo sí observamos una pérdida de peso progresiva es necesario acudir a nuestro veterinario ya que podría estar padeciendo alguna enfermedad.
  • INCISIVOS: Nuestro veterinario puede enseñaros a observar los incisivos y así hacer revisiones en casa cada semana.

La salud bucodental en conejos y roedores es compleja, ya que tienen dientes de crecimiento continuo, su cavidad oral es de pequeño tamaño y tienen pliegues en las mejillas que dificultan la visualización de las piezas dentales, pero recordamos que un buen control y revisiones periódicas en nuestras mascotas pueden detectar problemas, buscar una rápida solución y así mejorar su calidad de vida.

Inés Díaz Álvarez. Responsable servicio de animales exóticos del HV Nacho Menes.