¿Los perros pasan frío y enferman como nosotros en invierno?

¿Los perros tienen frío? ¿Enferman como nosotros con la llegada del invierno? ¿Debería permitir que mi mascota duerma en una cama calentita cerca del radiador? Todas estas son preguntas frecuentes cuando desaparecen los últimos retazos de otoño, de modo que vamos a examinar algunas de las enfermedades y achaques frecuentes en esta temporada para prevenirlas.

Ha llegado el invierno y con ello una bajada sensible en la temperatura ambiental y una mayor humedad, lo cual hace más vulnerables a los perros a ciertas enfermedades. Además, algunas patologías crónicas pueden ver exacerbados sus síntomas como consecuencia de los cambios de temperatura y humedad.

El aparato respiratorio y el sistema locomotor son los más susceptibles de verse afectados por las bajas temperaturas invernales.

 

Enfermedades caninas del aparato respiratorio frecuentes en invierno

El frío y la humedad facilitan la inflamación de las vías respiratorias y la invasión y multiplicación de determinados microorganismos en el sistema respiratorio. Las condiciones ambientales, de humedad y temperatura, son las propicias para la proliferación de virus y bacterias responsables de los procesos infecciosos que afectan al tracto respiratorio. Además, se pasa menos tiempo al aire libre y hay una menor ventilación de los lugares donde habitamos.

  • Traqueobronquitis infecciosa canina

La Traqueobronquitis infecciosa en perros, conocida vulgarmente como “tos de las perreras” 0 incluso «coronavirus perros«, es una enfermedad infecciosa canina que tiene más incidencia durante esta época del año. Se trata de una enfermedad que puede estar producida por gran número de agentes víricos y/o bacterianos. Se caracteriza por la presencia de una tos seca, habitualmente fuerte, y no productiva. Es una enfermedad muy contagiosa entre perros a través de las secreciones respiratorias, y que tiene más incidencia en lugares donde hay una gran concentración de canes tales como residencias, concursos o exposiciones, parques…

Muchas veces se trata de una enfermedad autolimitante, que remite con reposo y sin necesitad de tratamiento en un plazo de 7 a 10 días. En otras ocasiones, puede ser necesario administrar fármacos tales como antibióticos y/o antitusígenos.

En cuanto a la prevención existen diversas vacunas, inyectables, intranasales u orales, que podemos administrar para alguno o algunos de los agentes responsables de la misma, tales como Bordetella y/o el virus parainfluenza.

  • Neumonía

Las infecciones pulmonares como la neumonía son también más frecuentes en esta época del año sobre todo en individuos como cachorros, que no tienen todavía desarrollado su sistema inmunitario, o en perros mayores donde dicho sistema ya no funciona de un modo eficaz.

  • Bronquitis

Se trata de una enfermedad inflamatoria que produce tos crónica en el perro. En esta época del año los cuadros de tos, que no siempre se consiguen controlar con tratamiento, pueden verse acentuados.

  • Otras enfermedades respiratorias

Enfermedades respiratorias crónicas en perros como:

  • Colapsos traqueales
  • Broncomalacia
  • Parálisis laríngea

También pueden ver exacerbados sus síntomas durante este período.

 

Enfermedades del aparato locomotor en perros agravadas por el frío

Con la llegada del frío y la humedad en épocas invernales, los animales que padecen patologías degenerativas articulares, como por ejemplo la artrosis, suelen presentar un recrudecimiento de sus síntomas, y presentar o acentuar una cojera ya existente, ya que hay un aumento del dolor, de la sensación de entumecimiento y de la rigidez articular. Animales que tienen implantes en alguna extremidad también pueden presentar cojera como consecuencia de los cambios de temperatura y humedad.

El frío aumenta la viscosidad del líquido sinovial haciendo las articulaciones más rígidas y aumentando la fricción de los tejidos en su interior, además de producir vasoconstricción de los vasos sanguíneos, aumentando la rigidez de los músculos articulares y elevando la respuesta a los estímulos en los receptores del dolor, por lo que este se agrava.

 

Podemos prevenir los achaques del frío en perros con algunas medidas preventivas

Podemos evitar en mayor o menor medida que nuestra mascota sufra el cambio de estación, desde nuestro hospital veterinario recomendamos tomar estas acciones preventivas:

  1. Es importante secar bien a nuestros compañeros después de un paseo bajo la lluvia o la nieve y protegerles con un abrigo o ropa impermeable.
  2. Dormir en camas acolchadas y calientes, que les aíslen del frío y la humedad.
  3. Evitar cambios bruscos de temperatura.
  4. Incluso en esta época del año, para los perros con artrosis, es importante realizar ejercicio físico regular para mantener la masa muscular, ya que su pérdida puede agravar los síntomas.
  5. Adaptar la ingesta de alimento a esta época del año, donde se suele salir menos a pasear, y, por lo tanto, consumir menos energía. Un exceso de peso sobrecarga las articulaciones.
  6. Tener especial cuidado si nuestro perro tiene una enfermedad crónica, especialmente respiratoria o cardiaca, o si es un cachorro o tiene una edad avanzada, ya que su sistema inmunitario aún es inmaduro, en el primer caso, y no funciona con la misma eficacia en el segundo.